«Hay muy buen rollo en el escenario y eso se trasmite al público, es lo primero, somos muy pasionales, nos gusta, lo disfrutamos (…) si pensásemos en otra cosa nos iría mal o si tuviésemos que comer de esto tendríamos los dientes mellados de tanto pan duro.»
«El Cuarto Verde es una excusa musical, lúdica y gastronómica para poder subirnos encima de un escenario y desnudarnos, cortarnos el pellejo, sacarnos las tripas y entregar nuestras vísceras en una bandeja de plata al pavo o la pava que ha pagado una entrada para escucharnos en directo».
«A propósito del disco, a los hijos, aunque sean unos hijos de puta, hay que quererlos hasta el final».
«A la música le pedimos que nos siga haciendo pensar, que nos siga emocionando y que siga molestando, que nos siga entreteniendo y haciéndonos la vida más útil y divertida.»
«Pecar no es malo en sí, todos son necesarios e inherentes al ser humano, la historia es que nos han metido por los ojos lo que es bueno y malo. Sigue pasando ahora, las radios, los periódicos, las cadenas de televisión, todas son partidistas y te dicen y aconsejan lo que hay que pensar y lo malo es que les funciona, porque somos muy vagos y muy bien mandados y es más fácil obedecer que pensar por uno mismo.»
«Tengo que reconocer que hay momentos que me han recordado a las Nancys Rubias, pero con el toque que El Cuarto Verde sabe hacer. Espero no ofender a nadie, no es la intención.»
«No hemos buscado una provocación en realidad, hemos hecho unas canciones con un objetivo personal, nos hace felices tocarlas y eso es lo que se queda el público, que nuestra música es de verdad, que no hay artificio alguno, que nos lo creemos por muy buenos o malos que sean los temas, y eso encima de un escenario o en los altavoces de tu loro se nota.»